lunes, 7 de diciembre de 2015

Reseña: Doc. Luden Looksharp - Cacophonorgy (Furry Heart Records, 2015)


Cuando lo que tienes a tu alrededor no te gusta, existen dos alternativas que puedes tomar: la primera es quejarte amargamente y esperar a que los cambios lleguen mágicamente; en cambio, la segunda vía consiste en que tú mismo te pongas a trabajar y con los recursos que tengas a la mano, fabriques tu propio camino.

Cansado de que los instrumentos actuales no le permitían obtener el rango de sonidos que él quería, el italiano Doc. Luden Looksharp optó por construir su propio artefacto, todo siguiendo el viejo pensamiento punk del Do It Youself. De esta manera fue que inventó el cacophonator, que explicado de la manera más sencilla es un generador de sonidos concretos.

Antes de proseguir hay que mencionar que Luca Collivasone –nombre real del músico– no es ningún novato y, de hecho, sus inicios se dieron dentro del punk y la escena gótica en su país natal, pero con el pasar de los años se fueron expandiendo sus gustos y en general, su forma de apreciar los sonidos, hasta que conoció el trabajo de Brian Eno, un nombre clave dentro de su vocación artística.

En una honesta revelación, Looksharp ha comentado que su máxima inspiración para la invención de su artilugio fue el trabajo de su compatriota Luigi Russolo (1885-1947), un destacado artista que se desempeñó en distintas ramas pero que suele ser recordado por ser el autor del manifiesto El arte de los ruidos y también por ser uno de los primeros músicos experimentales de la historia.

El Doc tomó como base una vieja máquina de coser SINGER de 1940, a la que se dedicó a modificar durante un largo proceso que duró más de un año. En definitiva, la paciencia es esencial cuando uno quiere realizar una hazaña de este tipo, pero el resultado obtenido fue tan satisfactorio que de inmediato supo que tenía ante sí el instrumento que le brindaba los sonidos que tanto había buscado, por lo que fue natural iniciar la composición de su álbum debut.

Es demasiado complicado plasmarlo por escrito pero este nuevo instrumento se caracteriza por la versatilidad de sonidos mecánicos que puede generar, aunque siempre con el apoyo de un humano que le ayude a generarlos porque tampoco se trata de un aparato que funcione simplemente con apretar un botón. En cierto modo, el cacophonator funciona para transportar a cualquiera a la época de la Revolución Industrial, cuando el sonido de las máquinas y la producción en serie se volvió habitual en las grandes metrópolis. 

Si al músico europeo se le quisiera relacionar con cualquier otro colega de la actualidad, tanto por su actitud como por el hecho de diseñar sus propios instrumentos, el primer nombre en la lista sería Quintron, el one-man-band estadounidense inventor de la famosa drum buddy que inclusive ya patentó. Así que antes de desviarse de tema, la mejor forma para entender el funcionamiento y el rango de sonidos que puede generar el cacophonathor es apreciar el siguiente video ilustrativo.


En Cacophonorgy se reúnen seis postales sonoras creadas únicamente con el cacophonator y el esporádico apoyo de un micrófono modificado con un vocoder con el que el italiano se encarga de vociferar una serie de inentendibles frases. Con ciertos guiños al trabajo robótico y experimental de la primera etapa de Kraftwerk, ligeras dosis de música 8 bits y ciertas referencias al mundo literario de escritores de culto de la talla de H. P. Lovecraft (no es gratuito que un tema se titule "At The Mountains Of Madness"), el resultado es completa y absolutamente INCLASIFICABLE. Tal vez, en un hipotético caso, funcionaría como la banda sonora de un videojuego retrofuturista.

Y para poder llevar a cabo una travesía de este tipo siempre son necesarios los cómplices y es aquí donde hace su aparición Furry Heart Records, un modesto sello italiano que decidió editar este trabajo en un pequeño tiraje en vinilo color verde fosforescente, con lo cual se redondea la experiencia recomendada para todos los que gustan de arriesgarse en las profundidades de los sonidos desconocidos.





No hay comentarios.: