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Más allá de la temática de sus letras, el punk suele ser rápido, intenso, directo y sin contemplaciones. Las canciones son como un huracán que llega y se va a gran velocidad, pero resulta imposible de ignorar y pasar por alto. Y justo así es como se puede describir a The Dick Dastardly's.
El quinteto proveniente de Italia tiene una corta trayectoria pero ya se ha ganado un lugar gracias a sus caóticas presentaciones. Resulta normal ver cuerpos semi desnudos que se azotan unos contra otros y cerveza tirada en el suelo en cada uno de sus conciertos.
Después de grabar un EP, este año llega el primer álbum del combo conformado por Punk (voz), Mengo (guitarra), Andrea (guitarra), Steve (guitarra), Poch (bajo) y Baco (batería). Lo único seguro es que el material resulta perfecto para los aficionados a los sonidos sucios y mal tocados pero llenos de furia.
A lo largo de una decena de canciones que ni siquiera llegan a los dos minutos de duración cada una, el quinteto muestra una clara influencia de GG Allin & The Murders Junkies tanto en cuanto a sonido como al tema de sus letras. Es también los acerca a conjuntos actuales como The Cavemen, Suicide Generation y Bad Mojos. Todo se resume a llevar una vida llena de excesos pero siempre disfrutar cada día como si fuera el último.
A su vez, algo poco común dentro del punk sudoroso es contar con tres guitarristas, algo que en el caso de The Dick Dastardly's se traduce en mayor poder. Son como el motor de un transbordador espacial.
El trabajo editado por los sellos Slack Records y S.F.A. Records cumple con su objetivo de sacar la furia que todos llevamos dentro. Ni siquiera hay momento para respirar porque ante el menor descuido el sonido del quinteto ataca todo lo que encuentra a su paso.
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