jueves, 31 de enero de 2019

Reseña: The Anomalys - Trooper 7" (Slovenly Recordings, 2019)




A nivel mundial, Holanda es reconocida por ser una de las naciones más avanzadas en todos los sentidos. La calidad de vida de sus habitantes así lo demuestra, además sus leyes muestran una apertura mental que se encuentran varias décadas adelantadas a lo que sucede en el resto del planeta.

Pero más allá de los puntos mencionados, también es un país que cuenta con un fuerte movimiento de punk y garage. Existen miles de jóvenes interesados en agitar sus cuerpos al ritmo de la música y también hay varias personas encargadas de hacer sonar sus instrumentos de la manera más frenética y delirante. Dentro del panorama reciente, uno de los mayores referentes es The Anomalys.

A lo largo de una década, el trío conformado por Bone (voz y guitarra), Rémi (batería) y Looch Vibrato (guitarra) ha ganado reconocimiento internacional por sus energéticas presentaciones. Gracias a eso sus integrantes han logrado realizar giras por toda Europa e inclusive han cruzado el Atlántico y en el 2012 estuvieron de visita en México.

También por la bestialidad de su sonido, no es de extrañar que de inmediato encontraron en Slovenly Recordings su cómplice ideal. Eso se tradujo en la publicación del álbum debut de los holandeses en el 2010. De forma paralela también han visto la luz numerosos sencillos.

De igual forma, se debe mencionar que la relación de los integrantes del trinomio con la música no se limita a The Anomalys. También cuentan con otros proyectos como el caso de Bone que forma parte del dueto The Sex Organs (recomendamos leer nuestra reseña de su álbum), Looch también toca con Magnetix Rémi también es baterista de Weird Omen y Escobar (recomendamos leer nuestra reseña de su álbum más reciente).

Ahora, el 2019 recibe el nuevo 7" de The Anomalys en el que se incluyen cuatro temas inéditos. Todas las canciones que aparecen destacan por seguir el mismo estilo del pasado y del que parece jamás se piensan desprender.

Un total de 8 minutos demuestra que no es necesario invertir demasiado tiempo para escuchar el material. Un par de guitarras que suenan como demonios nocturnos se unen a una estruendosa batería para conformar la artillería con la que atacan a los oídos.

No hay lugar para los descansos ni las baladas melancólicas. Aquí todo es punk & roll lleno de furia y ejecutado a máxima velocidad. Con la misma furia con la que inicia una canción también termina. Es tanta la energía que proporciona el material que resulta imposible no querer azotarse contra las paredes al escucharlo.


miércoles, 30 de enero de 2019

Reseña: Llobarros - Exótica & Fuzz (Sweet Grooves Records / Pipus Records / Monasterio de Cultura / Ola Records, 2019)




Por su naturaleza instrumental, la música surf suele combinar bastante bien con otros estilos y géneros. Tan sólo se debe recordar el caso de Dick Dale, quien aprovechó sus antecedentes libaneses para buscar una identidad propia en su sonido.

A lo largo de décadas posteriores, han surgido agrupaciones que han llevado las guitarras reverberantes a los terrenos del horror, ciencia ficción, punk, jazz y demás caminos. Pero existe una bifurcación que poco se ha explorado y ahora el trío español Llobarros busca adentrarse.

En este caso, la agrupación surgida en Valencia está conformada por Pep Ahuir (guitarra), David Vina (batería) y Víctor Avinyó (bajo). Lo más destacado de su trabajo es la combinación que muestran. Como lo indica el título de su 7" debut, a la música surf le añaden partes de exótica, garage instrumental, toques orientales y rock & roll.

Por lo anterior, el resultado obtenido enseña momentos delicados y tenues pero también poderosos y desenfrenados. Se ubica a medio camino entre la introspección y la locura, lo cual es bastante loable porque pocas agrupaciones lo logran.

De esta manera, el tema abridor del trabajo editado en conjunto por Sweet Grooves Records, Pipus Records, Monasterio de Cultura y Ola Records es "La Perla Exòtica", una de las piezas más trepidantes del año. Es dinamita pura que es capaz de hacer explotar todos los oídos a los que se exponga.

Un caso contrario de estos músicos que portan unos finos trajes con gorros turcos durante sus presentaciones ocurre con "Nocturna", una composición oscura y misteriosa como recorrer una jungla de madrugada. Por su parte, "The Lame (Marxa Mora)" es una canción protagonizada por una delicada guitarra que avanza en intensidad.

Dentro del actual panorama en el que la mayoría de grupos instrumentales suenan iguales entre sí, el caso de Llobarros es uno de los más interesantes. Desde su debut han logrado obtener un estilo único y propio gracias a la diversidad de sonidos que manejan, lo cual no es nada sencillo.

martes, 29 de enero de 2019

Reseña: The Cavemen - Lowlife EP (Slovenly Recordings, 2019)




Pese a que los neozelandeses de The Cavemen son conocidos por ser una de las agrupaciones más salvajes de la actualidad, otra de sus características es lo prolíficos que son. De manera permanente se encuentran de gira por el mundo y además siempre encuentran tiempo libre para ir a un estudio de grabación y dejar constancia de su trabajo.

Mientras que el año pasado se publicó su álbum Nuke Earth y el 7" Burn Out For Love ‎(recomendamos leer nuestra reseña), ahora de forma inmediata tienen listo un nuevo EP de la mano de los pandilleros de Slovenly Recordings.

El resultado son tres nuevas canciones que suenan exactamente igual a todo el trabajo previo del cuarteto conformado por Jack Beesley (guitarra), Jake Pringle (batería), Nick Armstrong (bajo) y Paul Froggatt (gritos). Es simplemente garage-punk ejecutado de la forma más precaria y ruidosa posible.

Por una parte, la canción homónima del 7" es un retrato del estilo de vida que llevan los integrantes de la banda. Su único objetivo es emborracharse y esparcir su música por todos los rincones del mundo. Gracias a su falta de interés por una vida ostentosa y llena de lujos es que han cumplido su meta.

A su vez, "Baby I'd Do It For You" es una acelerada composición de poco más de un minuto de duración. No existe ninguna complicación y hace recordar los primeros años de Black Flag con Keith Morris al frente, cuando se propusieron ser la antítesis del elaborado y pretensioso rock progresivo.

Finalmente, el 7" culmina con "Drownin'", una pieza low-fi con sonido de ultratumba y la aguardientosa voz de Paul al estilo de G.G. Allin y su controvertida vida de excesos.

Por lo pronto, queda claro que algunas cosas jamás van a cambiar y el sonido de The Cavemen es un claro ejemplo. Las ambiciones de los integrantes permanecen intactas, así como su facilidad para componer y grabar temas salvajes al instante.


lunes, 28 de enero de 2019

Reseña: J'ai Peur des Crabes - Cocobongo / City Walls 7" (Spazz Records, 2019)




A lo largo de los últimos años ha existido una explosión de agrupaciones que integran la psicodelia a su sonido. Se trata de un fenómeno mundial del que cada día se muestran nuevos exponentes y el cual parece no tener fin.

En este caso, uno de los ejemplos más recientes llega desde Montreal y recibe por nombre J'ai Peur des Crabes. Detrás del proyecto se encuentra Emmanuel Alias, un multiinstrumentalista que se encargó de las guitarras, bajos, teclados, batería y voz de los dos temas que componen su 7" debut.

Con una fuerte influencia de Velvet Underground y el David Bowie de los setenta, el sonido es tan psicodélico como el arte de portada realizado por Rens Muis de 75B.

Por una parte, la cara A contiene a "Cocobongo", pieza que inicia con un tranquilo estilo veraniego hasta explotar y convertirse en una delirante composición que genera adicción. En cambio, la cara B es protagonizada por "City Walls", canción más tranquila que incluye una armónica que le brinda pequeños toques de blues.

A su vez, el lanzamiento sirve para engrosar el catálogo del sello holandés Spazz Records, que en menos de un año de haber sido fundado ya ha publicado seis lanzamientos. Lejos de ser simplemente un pasatiempo, el trabajo de la joven disquera es bastante loable por todo lo que ha logrado y la exposición que le brinda a pequeños proyectos como J'ai Peur des Crabes.


jueves, 24 de enero de 2019

Reseña: The Silly Walks - Hazy Fuzzy Buzzy (Family Spree Recordings, 2018)




A lo largo de la historia, la música se ha caracterizado por la constante renovación. Sin importar el género, a diario aparecen agrupaciones que buscan llenar los lugares de las bandas que desaparecen. Es el ciclo de vida en el que sólo los más persistentes logran destacar y mantenerse durante largos períodos de tiempo.

A pesar de que algunos señalan la actual explosión de garage que vive Francia, en realidad siempre ha estado presente. La diferencia es que ahora se cuenta con las herramientas para estar informado al instante de lo que sucede del otro lado del planeta.

Una de las caras más jóvenes y destacadas del rock galo es The Silly Walks, trío conformado por Axelle (batería), Rémy (bajo, theremin) y Ronan (guitarra, voz) y el cual se caracteriza por su aguerrido sonido.

En lugar de pretender innovar, lo único que buscan es tocar rápido y a máximo volumen. Han aprendido de eminencias como The Cramps, The Monsters y Tav Falco para ofrecer canciones que también tienen claras referencias a las viejas películas de ciencia ficción y horror.

La pasión por el cine se hace evidente gracias a pequeños sampleos utilizados al inicio de algunas canciones. Así sucede con "Make You Wet" y el tributo que muestra al clásico zombie Night of the Living Dead de George Romero.

Después de publicar un EP homónimo en el 2017, ahora el trinomio presenta su primer LP a través del sello español Family Spree Recordings. El resultado se concretó en 10 composiciones originales de puro rock con fuzz, una batería desenfrenada y ocasionales apariciones de un theremin.

Ahora, a la actual generación francesa de bandas de garage y sonidos afines como Bad Ass Mother Fuzzers, Jon And The Vons, Lonely Destination, The Scaners y Gerry Bright & The Stokers se debe añadir el nombre de The Silly Walks. La lista cada vez es más extensa, lo que significa que algo se está haciendo bien.


martes, 22 de enero de 2019

Reseña: The Ghetto Blasters - Hot Rocks / Too Loose 7" (Spazz Records, 2018)




Ya sea por inconformidad o simplemente por diversión, el punk se mantiene vigente y presente en todo el mundo. De forma constante surgen agrupaciones de sonidos feroces que incitan a la agitación de cabezas y el choque de cuerpos.

Como muestra, el sello Spazz Records trae el primer lanzamiento de The Ghetto Blasters, joven cuarteto proveniente de Tennessee. Pese a ser la primera referencia del combo, sus integrantes han pasado por bandas como The Fast Boys, Tuff Tits y The Drug Czars.

Detrás de la agrupación de ritmos acelerados se encuentran Justin Savage (guitarra y voz), Buddha (guitarra), Terry Clouse (bajo) y Patrick Wilkey (batería). Respecto a su estilo, es simplemente punk rock que toma fuertes influencias de los Dead Boys y Teengenerate.

Las dos piezas que aparecen en su 7" debut destacan por la furia mostrada. Se evitan complicaciones y optan por el camino de la sencillez. El secreto es hacer parecer que cualquiera podría interpretar los temas, aunque realmente no sea así de sencillo.


lunes, 21 de enero de 2019

Reseña: Thee Braindrops - Lorraine EP (Family Spree Recordings, 2018)




Cuando se habla de garage a nivel global es indispensable hacer mención de España. El país europeo cuenta con uno de los movimientos más estables y abundantes del mundo. Las razones son muchas pero dentro de las principales es que ha propiciado un desarrollo integral en todas las ciudades y que existe una constante aparición de nuevos representantes.

Pero aunque lo normal es que las bandas que se forman estén integradas por jóvenes e inexpertos músicos, no siempre sucede así. También existen los casos en que personas con un amplio bagaje dentro del ámbito musical deciden forman proyectos alternos aunque su objetivo final continúe siendo tocar rock & roll.

Precisamente eso fue lo que ocurrió con Thee Braindrops, una de las caras más frescas del garage hecho en Madrid. Detrás del cuarteto se encuentran Bunny Shima (voz y percusiones), Big Pablo (bajo y coros), Carlos (guitarra) y Pablo (batería). Entre sus integrantes se encuentran músicos que han pasado por The Moonstones y Las Aspiradoras.

La experiencia de cada uno de ellos ha sido clave para el rápido crecimiento que ha tenido el cuarteto. Mientras que se formaron en el 2017, un año después publicaron su primer 7" a través del sello Family Spree Recordings y no será sorpresa que muy pronto tengan listo su primer LP.

Por una parte, el japonés Bunny Shima se encarga de cantar los cuatro temas del sencillo en inglés. Su voz gruesa y rasposa es el complemento ideal para el sonido sencillo pero certero de sus compañeros. Queda claro que lo que buscan es plasmar su admiración por el garage-punk de los sesenta. Hay partes de The Kingsmen, The Stooges y MC5. 

Otra característica fundamental de Thee Braindrops es que las cuatro canciones mostradas sólo fueron realizadas con una voz gritona, una guitarra, un bajo y una batería. No existen más elementos ni buscaron experimentar. Es rock & roll en su formato más básico.

Y para complementar la parte sonora, otro punto a destacar es la ilustración de portada creada por Mik Baro, artista que mantiene una profunda cercanía con el rock & roll. De esta manera se obtiene un objeto que no sólo se puede escuchar sino también observar.


LAS PESADILLAS AUDIOVISUALES DE PRIMUS REGRESARON A MÉXICO



El 2019 inició con el regreso de Primus a la Ciudad de México en una gélida noche invernal

Todas las fotografías son de Francisco Servín / MalfiCo

Dentro de la música como en cualquier arte, al humor es un elemento que muy pocos saben aprovechar. Mientras que algunos optan por la férrea solemnidad, otros se van al extremo opuesto y terminan con chistes simplones que no dan risa. 

Son muy pocos los que, al igual que Frank Zappa, cuentan con un sentido del humor inteligente, mordaz y crítico. Dentro de los alumnos más destacados se encuentra Les Claypool, bajista y fundador de Primus, quien regresó a la Ciudad de México para interpretar lo más destacado de su repertorio.


Como en pocas ocasiones, no hubo una banda abridora. Pese a que la influencia de Primus es bastante obvia en la mayoría de los grupos nacionales que combinan el rock con el funk, resulta muy difícil pensar en alguien adecuado. 

En medio de una sesión de jazz y dixieland proveniente del sonido local del Auditorio BlackBerry, los tres integrantes del combo californiano se acomodaron sobre el escenario y con la amplia experiencia con la que cuentan, se adueñaron del lugar.

Si bien, Les acapara los reflectores por su habilidad en el bajo de cuatro y seis cuerdas, el talento de sus compañeros es indispensable, en especial al momento de improvisar y alargar cada una de sus interpretaciones.


En un extremo de la tarima está Larry LaLonde, de perfil discreto pero bastante efectivo al momento de ejecutar los riffs con su guitarra. El entendimiento que tiene con Claypool es tan fuerte que ni siquiera necesitan mirarse porque cada uno sabe lo que tiene que hace. 

A su vez, en la parte posterior está Tim Alexander, el baterista que ha vencido a la muerte al reponerse de dos infartos. Al verlo tocar parecería imposible de creer que fue apenas en el 2016 cuando enfrentó el ataque cardíaco más reciente. Sin perder el estilo y con la precisión de un reloj, representa la base del trío.

Uno de los puntos que más destaca de Primus es su capacidad de volver cada una de sus presentaciones única e inigualable. Son de los pocos grupos de gran magnitud que se niegan a repetir un setilist a lo largo de una gira y prefieren interpretar canciones distintas y en diferente orden cada noche.


Pese a que el motivo central de su regreso a la Ciudad de México era presentar su álbum The Desaturating Seven, en realidad fue una noche en la que ejecutaron temas de su extensa discografía, muchos de ellos himnos para la llamada Generación X que vivió en su apogeo la década de los noventa.

Dentro de los momentos más destacados de la noche fue cuando Claypool se colocó una máscara de cerdo y junto a un contrabajo eléctrico y un arco ejecutó "Mr. Krinkle", canción que en su momento fue prohibida en MTV. A cada acción corresponde una reacción y en este caso fue uno de los momentos más ovacionados de la noche.

Pero de la misma forma en que un concierto de Primus está dominado por la improvisación, existen algunas constantes que invariablemente siempre ocurrirán. Una de ellas es el obligado intermedio en el que los integrantes aprovechan para descansar y sobre el escenario se proyectan episodios clásicos de Popeye, caricatura que acaba de cumplir 90 años y cuyo humor e irreverencia se puede apreciar en el trabajo del trío estadounidense.


La segunda mitad del concierto trajo todavía más canciones emblemáticas que han consolidado a Primus como uno de los conjuntos más importantes de su generación. Desde "Too Many Puppies" hasta "My Name Is Mud" y pasando por "Welcome to This World" y "Pudding Time". La selección estuvo pensada para dejar satisfecho al fanático más estricto.

Mención aparte merecen las animaciones proyectadas sobre el escenario para acompañar cada una de las canciones. No se trató sólo de un recurso adicional sino que realmente tenían una función específica y se sincronizaban con la música.

Fueron más de dos horas en las que Primus reafirmó que al contrario de muchos de sus colegas, ellos no viven del recuerdo ni la nostalgia. El nivel en su ejecución luce inclusive mejor que en su etapa más prolífica y no muestran signos de envejecimiento.

miércoles, 16 de enero de 2019

Reseña: Los Venturas - Playtime! (Green Cookie Records, 2019)




Buscar concebir algo diferente en un estilo instrumental como la música surf parece algo verdaderamente complicado. El principal problema de la mayoría de agrupaciones del género es que al final suenan demasiado parecidas entre sí, pero por fortuna existen algunas excepciones que realmente se esfuerzan por diferenciarse.

En ese sentido, uno de los casos más destacados es el de Los Venturas, quinteto surgido durante el cambio de milenio en Bélgica, nación más conocida por sus aportaciones a la música electrónica que a las guitarras reverberantes.

Después de realizar giras por toda Europa e inclusive cruzar el Atlántico para presentarse en Estados Unidos y México, el combo está de regreso con su quinto LP.

Lo más destacado es que continúa su exploración para combinar la música surf con otros estilos en apariencia bastante ajenos como el soul, exótica, rocksteady, psicodelia y los sonidos balcánicos. El licuado que se obtiene es tan rico y variado que resultaría injusto encasillarlo en un género en específico.

Al igual que sus últimos lanzamientos, el álbum fue editado por el sello griego Green Cookie Records y a través de 11 piezas se realiza un viaje que va de las soleadas playas de California ("Flat Earth Rocket Man"), a las misteriosas trompetas al estilo de Ennio Morricone ("Beans, Tortillas & Chili"), la tranquilidad hawaiiana ("A Hui Hou") y hasta llegar al rock & roll instrumental al estilo de The Ventures ("Camping Dallas").

El resultado del trabajo es una muestra clara que dentro de la música surf todavía existen muchos caminos por explorar. El estilo único de Los Venturas los coloca por encima de la mayoría de sus colegas que sólo reciclan sonidos antiguos en lugar de proponer.


martes, 15 de enero de 2019

Reseña: Les Robots - Do The Robot! / One Way Ticket To The Moon 7" (Spazz Records, 2018)




Aunque al inicio de un nuevo proyecto se puedan tener muchas ganas, lo verdaderamente interesante es la continuidad. Más allá de arriesgarse por hacer algo, siempre se debe tener en cuenta que los resultados no siempre son inmediatos y por eso es necesario el trabajo constante.

Fue por lo anterior que durante el 2018 nació una interesante disquera que pese a lo arriesgado de su propuesta, se ha mantenido estable y con lanzamientos constantes. Se trata de Spazz Records, fundada por los holandeses Marcel Haug y Gary van Niks.

Lo más llamativo son las características que desde un inicio se dieron a conocer y a la fecha se han mantenido. El sello sólo publica 7" en tirajes limitados de 300 copias, además de que tratan de abarcar distintas caras del rock & roll que se crea alrededor del mundo.

Todo lo anterior lleva al lanzamiento del primer 7" de uno de los conjuntos más misteriosos y enigmáticos de la actualidad. Se trata de Les Robots, dueto conformado por las creaciones robóticas que responden a los seudónimos de D.V.R. y R-JoHN. De forma adicional, en sus presentaciones se hacen acompañar de Pete-R, C.A.S.E. Mars-L.

Al información en torno al conjunto es bastante escasa, pero respecto a su sonido maneja una fuerte influencia del legendario productor Joe Meek, conocido por sus experimentos en los estudios de grabación y ser el compositor de "Telstar" que popularizaron The Tornados en 1962.

Respecto al concepto detrás de Les Robots, recuerda en demasía a Servotron Orgone Accumulators porque también utilizan disfraces sobre el escenario, aunque en cuanto a la parte musical se trata de rock & roll instrumental acompañado de múltiples teclados. El resultado podría ser la banda sonora de uno de los antiguos filmes de ciencia ficción.

La primera muestra del trabajo de este enigmático conjunto de raíces holandesas resulta tan misteriosa como adictiva. El estilo musical es totalmente inclasificable pero resulta imposible ignorarlo.


Reseña: The Bardulians - Here We Go! (Green Cookie Records, 2018)




Mientras que la voz es un recurso con el que la mayoría de los músicos buscan transmitir un mensaje a través de su canciones, la historia ha mostrado que no siempre es necesaria. Con el apoyo de otros elementos también es posible obtener los mismos resultados y la ventaja es que no existen barreras entre idiomas.

De esta forma, existe el camino de la música instrumental. Sus representantes son variados en todo el mundo y ahora se suma el nombre de The Bardulians, quinteto vasco que ha logrado llamar la atención por su refinado sonido.

El conjunto formado en el 2012 en Bilbao está conformado por Lando Stone (bajo), Xavier Urrutikoetxea (batería), Iskander Vesga (saxofón), Alfredo (guitarra) y Joseba Negro (hammond). La distintiva formación es la encargada de ofrecer un rico sonido que se alimenta del lounge, exótica, space pop, jazz, funk, soul y ligeros toques de música surf.

Al escuchar su primer material, editado en CD por el sello griego Green Cookie Records y producido por Mike Mariconda, lo primero que llega a la mente son nombres de leyendas como Les Baxter y Martin Denny, aunque también tiene parecido con proyectos actuales como The Link QuartetThe Gentlemen's Agreements.

Dicho de otra forma, el estilo de combo europeo encaja a la perfección con la música que habitualmente se escucha en el programa de El Muñecón. Son sonidos elegantes que recuerdan la época de las mujeres con elaborados peinados y cuando los hombres se preocupaban por su vestimenta.

A lo largo de siete piezas, The Bardulians demuestra que el poder de la música es tan grande que no requiere de voz para comunicarse. Escuchar el material es como viajar varias década en el tiempo y recordar cuando la elegancia imperaba entre la juventud.


lunes, 7 de enero de 2019

Reseña: Frankie And The Pool Boys - Spin the Bottle (Double Crown Records, 2018)




Pese a que existe un estereotipo que indica que la adolescencia es la mejor etapa de la vida para formar una banda, la realidad no siempre es así. Si bien, conforme pasan los años se adquieren obligaciones que restan tiempo, la pasión por la música puede hacerse presente en cualquier momento y sin importar la edad que se tenga.

De esta forma, fue durante la primera década del Siglo XXI que experimentados amigos optaron por formar un nuevo "súpergrupo de música surf". Todos ya contaban con una amplia trayectoria con distintas agrupaciones (The Surf Coasters, The TomorrowMen, Meshugga Beach Party, Pollo Del Mar, The Gregorspero eso no fue impedimento para iniciar otra aventura en los terrenos de la música instrumental.

Después de poco más de 10 años y con dos álbumes previos, Frankie And The Pool Boys publicó su tercer LP en el que existen aspectos que se mantienen y otros que resultan novedosos dentro del quinteto.

En primer lugar, destaca que la agrupación encontró una estabilidad de integrantes. De los fundadores se mantienen Ferenc Dobronyi (guitarra) y Keren Dobronyi (teclado), a los que ahora se suman Jono Jones (guitarra), Abraham Aguilar (bajo) y Jonathan Rodriguez (batería y percusiones).

A su vez, en su nuevo material se optó por primera vez incluir cuatro temas con voz, pero aunque podría ser un pecado mortal para los puristas de la música surf, al final no existe ningún delito por perseguir. El sonido que recuerda el choque de las olas del mar e invita a montar una tabla prevalece en la mayoría del álbum.

Otro punto a destacar es que en esta ocasión el disco tiene un concepto que lo vuelve distintivo. Como punto central se parte del juego infantil "de botella". Lo que cuestionan los integrantes es si realmente existe la suerte o se puede tener el control de todas las decisiones de la vida.

De igual forma, como productor se contó con Dusty Watson (baterista de The Sonics, Dick Dale, Agent Orange y Slacktone), quien logró encontrar un equilibrio y potencializó el poder del quinteto. Eso queda reflejado en la inicial "Seafoam Angels" con unas guitarras que transpiran felicidad en cada nota, pero también se puede apreciar "The Wet Season" con su sonido psicodélico y "Summer Cold" que muestra la versión más tranquila e introspectiva del material.

La parte conceptual que rige las 20 composiciones presentadas (entre las que hay un cover de Booker T & The MG's y uno de The Surf Coasters) es complementada por la ilustración de portada del artista noruego Fred Lammers. Es claro que existe pleno entendimiento entre ambas partes porque también fue el encargado del arte de su álbum anterior.

Pese a que la música surf puede tener muchas limitantes, son trabajos como el realizado por Frankie And The Pool Boys los que muestran que en realidad todavía existe mucho terreno sin explorar. Sin buscar convertirse en una agrupación referente, con cada uno de sus álbumes logran colocarse un paso adelante con respecto a sus colegas.