En México, existen muy pocas bandas que de verdad se han enfrentado a todo tipo de adversidades y continúan de pie. Una de ellas es The Cavernarios.
En algunos aspectos, pareciera que Cuautitlán Izcalli es un punto remoto perdido en el tiempo y alejado de todo. Siendo uno de los 125 municipios del Estado de México, es una porción de tierra que no se caracteriza por muchas cosas sobresalientes; sin embargo, fue ahí donde cuatro jóvenes aficionados al rock & roll sencillo se conocieron y se les ocurrió formar una banda musical.
Conformado por Daniel "Danny Lobo" Palacios (guitarra y voz), Omar Bustamante (guitarra), Omar "Alf" García (bajo) y Sergio García (batería), The Cavernarios es como un camaleón que reniega de permanecer estancado en un género y siempre gusta de transformar su estilo. Lo mismo son capaces de realizar temas instrumentales de música surf, coquetear con el western, incursionar dentro del garage o adentrarse en el sonido de la onda chicana. Al final, la única constante es su pasión por el rock & roll primitivo como el propio nombre del conjunto.
Con motivo del reciente lanzamiento de su nuevo álbum en vivo con el que celebran sus primeros 15 años de trayectoria, tuvimos la oportunidad de platicar con Daniel Palacios, quien nos contó más sobre la historia de la banda, la detención que sufrió en el 2013, por qué el grupo nunca ha cambiado de integrantes y lo que podremos esperar a futuro de la banda.
15 años de ser The Cavernarios. Fotografía cortesía de la banda |
La banda acaba de cumplir 15 años, ¿en
un inicio de verdad te imaginaste que estarían juntos durante tanto tiempo?
Daniel Palacios (DP): La
realidad es que cuando empezamos nunca tuvimos expectativas; nunca pensamos que
íbamos a grabar un disco profesional ni nada de eso. Nosotros empezamos a tocar
por gusto y las cosas simplemente se dieron. Cuando la banda empezó nunca nos
imaginamos que duraría tanto tiempo; en cambio, ahora creo que no podemos
imaginar nuestras vidas sin la banda.
A lo largo de estos años ustedes se
han enfrentado a infinidad de problemas pero al final aquí siguen, ¿para ti
cuál crees que ha sido el mayor obstáculo que han vivido?
DP: Han
sido muchos, desde problemas personales de cada uno de nosotros con nuestras
parejas, crisis tanto mentales como financieras o tener que dividir el tiempo
con nuestras familias para estar con la banda, pero para mí serían dos los
momentos más complicados que ha vivido la banda.
El
primero fue en nuestros inicios, justo cuando apenas lanzamos nuestro primer
demo (Primitive Songs, 2002) y Omar, guitarrista de la banda, se fue de viaje a
Europa durante casi un año; además, casi al mismo tiempo, Alf, el bajista, tuvo
un accidente muy fuerte y se fracturó la muñeca. Con esos dos golpes casi al
mismo tiempo, yo pensé que ya se había terminado la banda y por eso dejamos de
tocar por más de medio año. Afortunadamente, con el pasar del tiempo Alf se
logró recuperar y decidimos retomar la banda ahora como trío porque la verdad
nunca pasó por nuestras mentes el buscar a otro integrante. Lo curioso es que a
partir de esto fue que tuve que empezar a cantar para rellenar los huecos de
las canciones porque originalmente queríamos ser una banda completamente
instrumental. Unos meses después regresó Omar a México y se reincorporó a la
banda.
El
segundo momento fuerte que hemos vivido fue cuando a mí me detuvieron durante
las manifestaciones del 2 de octubre de 2013 y estuve preso durante más de medio año. A pesar de esto, cuando mis compañeros me iban a visitar a la cárcel yo
siempre les dije que no dejaran de tocar y por eso es que la banda pudo superar
esto.
A lo largo de estos 15 años ustedes
siempre han tenido a los mismos integrantes, algo muy poco común dentro del
circuito musical mexicano, ¿a qué crees que se deba esta unión?
DP: Yo
creo que se debe a que, desde un inicio, ninguno de nosotros tenía realmente
expectativas de la banda. A diferencia de otros grupos que sueñan con ser
famosos, tener mucho dinero, mujeres y grabar discos, nosotros todo lo hemos
hecho por diversión y es algo en lo que coincidimos los cuatro integrantes.
Nosotros nos juntamos porque éramos amigos de la misma zona, recuerdo que al primero
que conocí fue a Alf, que es un poco más grande que yo, y me uní a una banda
que él tenía. Después conocí a su hermano menor, Sergio, e iniciamos una fuerte
amistad porque tenemos la misma edad y somos de gustos similares. Y justo
después conocimos a Omar y ya con los cuatro fue que empezó formalmente The
Cavernarios. Nosotros siempre hemos sido conscientes de nuestras limitaciones y
nunca nos ha interesado ser la mejor banda de México… ni siquiera ser la mejor
banda de nuestra colonia, lo único que siempre hemos intentado es tocar rock
& roll y ya. También ha sido muy importante la amistad y el entendimiento
que existe entre los cuatro.
Hace unos meses lanzaron su primer álbum
en vivo (XV Años en Vivo en el Alicia, 2017) para celebrar los 15 años de la
banda, ¿me puedes platicar sobre el disco?
DP: El
audio del disco lo tomamos de un concierto que hicimos el año pasado en el Foro
Alicia y fue una noche realmente sudorosa. Recuerdo que nuestra presentación
duró más de dos horas, algo que no es normal y de hecho es el concierto más
largo que hemos ofrecido. Cuando nos pusimos a revisar el audio, teníamos más
de 30 canciones y tuvimos que empezar a descartar varias por el problema de la
capacidad de un CD, inclusive varios temas inéditos los tuvimos que dejar fuera
y sólo aparecen los que consideramos que representan mejor lo que ha sido The
Cavernarios a lo largo de estos 15 años. Y como bonus track incluimos nuestra
nueva canción “Aves Negras”, que tomamos de la prueba de sonido del concierto
del Foro Alicia. En lo personal, me gustó el resultado final del disco en vivo
porque creo que engloba muy bien las etapas que ha tenido la banda, además de
que incluimos muchas canciones de nuestros primeros dos demos (Primitive Songs,
2002; The Animal Music, 2003), que teníamos años de no tocar y ahora, al escucharlas
en el disco es cuando veo que sí hemos mejorado y ya tenemos un sonido más
personal. Y aunque no fue intencional, la mitad del disco es instrumental y la
otra mitad con voz.
El bonus track que mencionas es “Aves
Negras”, que para mí tiene una letra demasiado politizada y esperanzadora, ¿me
puedes contar más sobre el origen de la canción?
DP: Sí, es
una canción que yo escribí a los pocos meses de salir de prisión. Un día estaba
yo solo en mi casa y saqué la parte de la guitarra pero no se me ocurría nada
para la parte de voz. Pasó un tiempo y entonces me enteré que Alejandro
Bautista, quien fue encerrado conmigo a raíz de las manifestaciones del 2 de
octubre de 2013, falleció. Fue a partir de esta triste noticia que compuse la
letra de la canción, que habla acerca de que muchas veces en los movimientos
sociales y las manifestaciones callejeras no se gana nada por tratar de luchar
por causas justas, pero eso no significa que no se deba intentar.
Su nuevo álbum en vivo también fue
lanzado en una limitada edición en cassette, ¿por qué decidieron lanzarlo
también en ese formato?
DP: En
realidad la idea de lanzar algo en cassette es algo que teníamos planeado desde
hace tiempo pero apenas con este disco en vivo se concretó. Yo creo que en la
actualidad todos los formatos son válidos para distribuir la música. En nuestro
caso, recuerdo que los dos demos que hicimos en nuestros primeros años, fueron
en nuestras casas conectando la consola al estéreo y todo lo grabamos en
cassettes de forma bastante primitiva.
Hace un par de meses la banda se
presentó por segunda vez en el festival Vive Latino pero fue la primera ocasión
con la alineación completa, ¿a ti qué tal te pareció el festival?
DP: Para
mí fue muy extraño porque en realidad no somos una banda acostumbrada a tocar
en escenarios grandes ni en festivales de este tipo. Para el Vive Latino de
este año lo único que planeamos con anticipación fue invitar a tocar con
nosotros a Marco (guitarrista de Electric Shit) porque todo lo demás fue
bastante improvisado. Decidimos invitarlo a tocar con nosotros porque Electric
Shit es una de nuestras bandas mexicanas actuales favoritas, además de que
tenemos una amistad cercana porque Omar grabó las canciones de su nuevo disco
que saldrá próximamente. Respecto al Vive Latino, la verdad nunca hemos creído
que se trate de lo máximo, pero lo que sí respetamos y nos gusta es que se
trata de un festival que te brinda buenas condiciones para ofrecer un concierto
profesional, como llevar un ingeniero de audio y contar con un proyector para
acompañar nuestra presentación. Algo agradable fue que a pesar de que vimos a
varios amigos entre el público, en realidad la mayoría eran personas que nunca
habíamos visto y creo que tocar para un público nuevo o personas que no conocen
tu música es un gran reto que nos ayuda a salirnos un poco de nuestra zona de
confort.
Por
otra parte, contrario a lo glamuroso que puede parecer el Vive Latino, a
nosotros nos pasaron muchas cosas graciosas antes del concierto. Por ejemplo, nunca
pasó el transporte que nos iba a llevar al Foro Sol así que tomamos un Uber,
tuvimos que recorrer todo el estacionamiento con las cosas cargando y llegamos
al escenario justo 15 minutos antes de nuestra presentación. Ahora, a la
distancia, ya vemos todo con humor.
Desde tu punto de vista, ¿qué
diferencias encuentras entre tocar con The Cavernarios y hacerlo con
Telekrimen?
DP: Para
mí son estilos muy diferentes. The Cavernarios es una banda de amigos de toda
la vida porque aunque el proyecto tenga 15 años, en realidad nos conocemos
desde muchos años atrás porque somos vecinos del barrio; por otra parte, con
Telekrimen yo primero llegué como músico invitado en su disco Resurrección De
Los Sangre-Zombis Del Más Allá (2008) porque ellos querían meterle unas voces y
gritos en un par de canciones, pero después ya me quedé como integrante de la
banda. Creo que al inicio a muchas personas les costaba trabajo aceptar que
Omar y yo éramos parte de ambas bandas y nos hacían muchas bromas, pero creo que ahora ya es algo normal,
además de que cada grupo ha tomado su propio camino bien definido.
Ustedes tienen confirmadas dos
presentaciones muy diferentes entre sí. En unos días van a ofrecer un concierto
muy pequeño en El Hijo del Cuervo y el próximo mes se presentarán en el
festival masivo Wild O, ¿cómo logran definir su setlist y adaptarse a las
circunstancias?
DP: Es muy
raro pero creo que a lo largo de los años nos hemos caracterizado por
adaptarnos a distintos estilos, además no estamos casados con un género en
particular ni somos puristas de nada. En el caso particular del concierto en El
Hijo del Cuervo, como sólo vamos a tocar nosotros entonces nos vamos a extender
y ofreceremos un mosaico de lo que ha sido nuestra carrera a lo largo de 15
años; por otra parte, para el festival Wild O todavía no nos han informado los
horarios ni el tiempo que durará nuestra presentación pero obviamente serán
pocos minutos así que tendremos que hacer una selección más cuidadosa de los
temas que interpretaremos.
A lo largo de su carrera, The
Cavernarios se ha caracterizado por transitar a través de distintos caminos
musicales como la música surf, el garage y hasta la onda chicana, ¿ahora hacia
dónde se encaminará la banda?
DP: En
realidad, sólo para nuestro disco Camino A Varadero (2011) nos propusimos desde
un inicio hacer un álbum temático centrado en la música surf y las raíces
latinas, porque para el resto de nuestros materiales siempre dejamos que las
cosas fluyan y no nos presionamos por adentrarnos en un género en particular.
Creo que en la actualidad la banda está entrando en una nueva etapa y las
nuevas composiciones que tenemos y que hemos interpretado en algunos
conciertos, se caracterizan por no tener nada en común entre sí. Tenemos una
canción completamente instrumental, otra más cercana al rock de los setenta,
otra más cercana al sonido psicodélico y otra más sucia y ligada al garage. Yo
creo que lo que necesitamos es seguir componiendo para poder determinar ahora
hacia qué camino musical nos vamos a dirigir.
A pesar de que acaban de lanzar su
disco en vivo, ¿tienen planes de lanzar pronto un disco en estudio?
DP: Sí, yo
creo que ya nos tardamos mucho porque nuestro material en estudio pasado fue
Puertas Cerradas (2012). A mí me gustaría tener listo un nuevo disco para el
próximo año pero tampoco es algo que sea urgente y simplemente vamos a dejar
fluir las cosas y que todo salga cuando tenga que salir.